Se sentirá como un baño de vapor en algunas partes del país durante los próximos días.

Los meteorólogos predicen un fin de semana «brutalmente» caluroso y húmedo en muchas regiones, con temperaturas que alcanzarán los tres dígitos. La ciudad de Nueva York se prepara para un sábado con una temperatura máxima de 106 Fahrenheit debido a la masa de aire tropical húmedo que se cierne sobre toda la costa este como una manta húmeda.

Demasiado calor puede ser peligroso, pero cuando se combina con una alta humedad, el cuerpo tiene aún más dificultades para refrescarse. La humedad también puede afectar al cerebro.

¿Por qué somos tan sensibles a la humedad?

La humedad es la cantidad de vapor de agua que hay en el aire. Cuando transpiramos, nuestro cuerpo normalmente depende del aire para deshacerse del sudor que se acumula en la piel. Esto permite que el cuerpo se enfríe. Cuando la humedad del aire es alta, la humedad caliente permanece en nuestra piel durante más tiempo, lo que nos hace sentir aún más calor. Los meteorólogos llaman a esto «índice de calor».

Según el Servicio Meteorológico Nacional, el índice de calor es una medida del calor que realmente se siente cuando la humedad se suma a la temperatura real.

Por ejemplo, si el termómetro de su jardín marca 96 °F y la humedad relativa es del 65 por ciento, el índice de calor -el calor que siente su cuerpo- es de 121 °F.

Mire la tabla del índice de salud del NWS y podrá ver que esa combinación de temperatura y humedad pone a su cuerpo en peligro de sufrir un trastorno por calor.

Tabla del índice de calor del Servicio Meteorológico Nacional.
Tabla del índice de calor del Servicio Meteorológico Nacional

Riesgos para la salud de la alta humedad

La alta humedad puede tener una serie de efectos adversos en el cuerpo humano. Puede contribuir a una sensación de baja energía y letargo. Además, la alta humedad puede provocar hipertermia, es decir, un sobrecalentamiento como resultado de la incapacidad del cuerpo para expulsar el calor de forma eficaz. La hipertermia puede causar:

  • Deshidratación
  • Fatiga
  • Calambres musculares
  • Extenuación por calor
  • Desmayos
  • Golpe de calor

Si usted o alguien con quien está muestra síntomas de golpe de calor, como dolores de cabeza, confusión o vómitos, busque atención médica inmediatamente.

Mal humor

Según los psicólogos, la humedad puede ponerte de mal humor. La ciencia es todavía bastante limitada, pero algunos estudios interesantes dicen que podría influir en las sustancias químicas del cerebro que regulan el estado de ánimo.

Los médicos también informan de que tienen pacientes que parecen experimentar una versión veraniega del trastorno afectivo estacional. Las personas que padecen este trastorno se sienten deprimidas y pueden experimentar ansiedad y, en algunos casos, incluso tener tendencias suicidas. Si experimenta alguno de estos síntomas, es importante que hable con un profesional de la salud.

Incluso de forma menos drástica, la humedad puede alterar algunas funciones básicas como dormir o mantenerse hidratado. La falta de sueño y la deshidratación pueden afectar en gran medida a nuestro estado de ánimo. Para empeorar las cosas, el hecho de no sentirse en control de la situación hace que algunas personas se pongan aún más de mal humor.

Aquí tienes 5 cosas que puedes hacer para mantenerte fresco este fin de semana:

  1. Baja el ritmo. Hacer más con este tiempo le hará sudar más y sentirse más molesto. La actividad física extenuante debe reducirse, eliminarse o reprogramarse para el momento más fresco del día. Las personas en riesgo deben permanecer en el lugar más fresco disponible.
  2. Vístase adecuadamente. La ropa ligera y de colores claros refleja el calor y la luz del sol, y ayuda al cuerpo a mantener una temperatura normal.
  3. Beba mucha agua o líquidos no alcohólicos. Incluso si no siente sed. Su cuerpo pierde más agua cuando hace calor, especialmente con el alto índice de calor de la humedad. Evite la cafeína, el alcohol y las bebidas azucaradas porque le hacen perder más líquido corporal.
  4. Evite el alcohol. Algunos estudios han demostrado que beber demasiado cuando hace calor aumenta el riesgo de morir.
  5. Pase más tiempo en ambientes frescos. Los espacios con aire acondicionado reducen notablemente el peligro del calor. Esto es fundamental para las personas con mayor riesgo, como los ancianos o las personas enfermas o debilitadas. Si no puede permitirse un aire acondicionado, pasar algún tiempo al día en un lugar con aire acondicionado le proporcionará cierta protección.
  6. Tenga mucho cuidado con los coches calientes. Nunca deje a nadie, especialmente a los niños, en un vehículo cerrado y aparcado. Tampoco se olvide de sus mascotas.
  7. No se exponga demasiado al sol. No sólo porque tendrás más calor. Si tu piel está dañada por una quemadura solar, te costará más disipar el calor.