14 de diciembre de 2018
Cada año, en Estados Unidos, se estima que mueren 125.000 personas por no tomar sus medicamentos exactamente como se los ha prescrito su médico. El uso correcto de los medicamentos en el momento y la forma adecuados suele evitar que las condiciones de salud empeoren, al tiempo que reduce el riesgo de hospitalización y muerte. Sin embargo, los medicamentos no se utilizan como es debido en aproximadamente el 50 por ciento de los casos.
¿Por qué la gente no toma los medicamentos como es debido?
Hay innumerables razones por las que los medicamentos no se utilizan como es debido, y no todas son intencionadas. Algunas personas se olvidan de tomar sus medicamentos o tienen dificultades para entender las instrucciones. Otras pueden dejar de tomar sus medicamentos para evitar efectos secundarios desagradables o porque creen que sus medicamentos no están tratando eficazmente los síntomas.
En algunos casos, las personas se saltan las dosis para que sus medicamentos duren más tiempo o porque no pueden permitirse reponer sus recetas de inmediato. Aunque todos los factores anteriores pueden parecer razones válidas para no utilizar los medicamentos según las indicaciones, el uso incorrecto de la medicación puede conducir a menudo a resultados adversos para la salud y a la fatalidad.
Beneficios del uso correcto de la medicación
Un mejor resultado para la salud es el beneficio más significativo de utilizar la medicación correctamente según lo prescrito. Los médicos prescriben medicamentos para tratar sus síntomas y para ayudarle a controlar o superar ciertas condiciones de salud. No utilizar los medicamentos tal y como se han prescrito puede dar lugar a un empeoramiento de la salud, a una recuperación más prolongada, a efectos secundarios no deseados, a trastornos por consumo de sustancias, a la muerte y a otras condiciones de salud graves que requieren un tratamiento intensivo.
Utilizar la medicación correctamente puede ayudarle a ahorrar el dinero que, de otro modo, se gastaría en los costes de atención sanitaria relacionados con el mal manejo de la medicación, como la hospitalización, las visitas a la sala de urgencias y el tratamiento de recuperación de adicciones.
Consejos para tomar la medicación según lo prescrito
Antes de utilizar un nuevo medicamento, lea atentamente todas las instrucciones de la etiqueta y pida ayuda y aclaraciones a su médico o farmacéutico si está confundido o no está seguro de cómo tomarlo correctamente. Esto puede evitar malentendidos que podrían llevar a duplicar accidentalmente las dosis o a usar menos de lo previsto.
Su médico o farmacéutico también puede explicarle los posibles efectos secundarios a los que puede enfrentarse si hace un mal uso del medicamento o lo combina con otras sustancias determinadas. Por ejemplo, las benzodiacepinas nunca deben mezclarse con opioides, ya que esta combinación puede provocar una sobredosis o la muerte.
Aquí tiene algunos consejos adicionales para tomar sus medicamentos según lo prescrito:
- Use su medicamento a la misma hora todos los días para evitar el solapamiento de las dosis.
- Mantenga una lista actualizada de todos los medicamentos que tenga a mano, para que cada médico y especialista con el que se reúna pueda detectar interacciones farmacológicas potencialmente mortales.
- Compruebe si sus medicamentos deben tomarse con el estómago vacío o lleno.
- Incorpore la medicación a su rutina diaria para no olvidarse nunca de tomarla, por ejemplo, antes de cepillarse los dientes por la noche o después de desayunar.
- Utilice envases diarios de pastillas para poder controlar si ha tomado sus dosis diarias.
- Recargue su pastillero diario el mismo día cada semana para evitar duplicar las dosis.
- Compre tapas con temporizador para todos sus frascos de pastillas para llevar la cuenta de la última vez que tomó sus medicamentos.
- No comparta ni regale los medicamentos. Esta práctica es ilegal y peligrosa y puede perjudicar a quienes tomen sus medicamentos sin una receta válida.
- Lleve consigo medicamentos adicionales cuando viaje por si se queda más tiempo del previsto.
- Cuando viaje en avión, lleve siempre los medicamentos en su maleta de mano para evitar que se dañen por los cambios de temperatura y presión atmosférica. Además, lo tendrá a mano si su equipaje se pierde o se daña.
- No deje de usar su medicación a menos que se lo indique su médico, ya que la interrupción brusca de algunos medicamentos puede provocar efectos secundarios graves.
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