Pasé mucho tiempo leyendo las etiquetas de los tés cuando estaba embarazada de Lily. A menudo estaba en casa de mi suegra y decidíamos que queríamos una taza de té. Entonces rebuscaba entre las latas, cajas y tarros de té de su armario, buscando uno que se adaptara a nuestro estado de ánimo y a mi estado de embarazo. En el trabajo, Starbucks acababa de presentar su nueva línea de tés y todos los baristas debíamos probarlos y promocionarlos. Pero la mayoría de los tés contenían ingredientes que no eran seguros para mí durante el embarazo.
Me ha sorprendido la cantidad de amigos que me han ofrecido infusiones en lugar de café cuando estoy embarazada. Son conscientes de que la cafeína no es lo mejor para el bebé, pero no se dan cuenta de que también hay que evitar algunas infusiones. Esto es lo que he aprendido sobre el consumo de café y té durante el embarazo.
Café y embarazo
Los estudios han demostrado que consumir demasiada cafeína durante el embarazo puede provocar un aborto espontáneo o un bajo peso al nacer. La cafeína actúa como estimulante, lo que aumenta tu ritmo cardíaco y tu metabolismo -y el de tu bebé-. Demasiado puede ser malo para el bebé.
Sin embargo, una o dos tazas de café al día están bien. Si le gusta más café que eso, intente cambiar al café descafeinado en su lugar. Para más detalles, consulte «La cafeína y el embarazo: ¿Qué es seguro?»
Té y embarazo
Los tés negro, verde y oolong contienen cafeína, aunque no tanta como el café, por lo que deben consumirse con moderación. El té verde puede impedir que el cuerpo absorba el ácido fólico y el hierro, nutrientes importantes para las mamás embarazadas.
Las infusiones no tienen cafeína, pero las hierbas tienen sus propias propiedades medicinales que pueden provocar un aborto o afectar al feto. El BabyCenter explica que «sólo se han estudiado algunas de las hierbas utilizadas para los tés en mujeres embarazadas». Si tienes un té favorito, pregunta a tu proveedor de atención prenatal si está bien que lo sigas bebiendo. La Clínica Mayo recomienda evitar las infusiones durante el embarazo, por lo que puede ser más seguro limitarse a tomar una o dos tazas de té normal o buscar otra bebida.
Las hierbas que probablemente querrá evitar durante el embarazo son la pasionaria, el sello de oro, el cohosh negro y azul (a menos que se lo recomiende su matrona para inducir el parto), la manzanilla, el hibisco (un ingrediente común en muchos tés), la hierba de limón, la raíz de regaliz y la onagra.
Entre las infusiones útiles durante el embarazo se encuentran las de jengibre y menta, que pueden reducir las náuseas matutinas, y el té de rooibos, que no contiene cafeína y es antioxidante. (Aun así, comprueba los ingredientes; el té de rooibos que hay en mi armario también contiene raíz de regaliz y manzanilla, dos hierbas que entran en la lista de «puede ser inseguro»). También puedes buscar tés preparados específicamente para mujeres embarazadas.
Beber café y té durante el embarazo
Al final, todo se reduce a lo que creas que es mejor para ti y para tu bebé. Mi primera comadrona me recomendó la hoja de frambuesa para fortalecer el útero; otros expertos en salud aconsejan evitar el té de hoja de frambuesa porque puede provocar contracciones uterinas y abortos. Personalmente, prefiero el café al té, pero probablemente seguiré limitándome a una taza al día y seguiré leyendo las etiquetas del té.
Como dice Marissa de Just Simply Mom, «La mayoría de las cosas con moderación deberían estar bien. Hará más daño a nuestro bienestar emocional y mental librar nuestras vidas de todos los productos potencialmente dañinos, así que es mejor usar cualquier cosa con moderación.»
¿Es usted un gran bebedor de café o té? ¿Seguiste bebiendo café y té durante el embarazo?
Descargo de responsabilidad: no soy una experta en medicina; simplemente estoy compartiendo mis opiniones basadas en lo que he aprendido en mi investigación de sitios web sobre el embarazo y el bebé. Te animo a que hagas tu propia investigación.
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