Vómitos después de un accidente cerebrovascular: Comprender por qué se producen y cómo tratarlos

Los vómitos después de un accidente cerebrovascular son una condición preocupante ya que agotan el cuerpo de fluidos y nutrientes vitales. ¿Existe alguna forma de detenerlos?

Hay varias causas de vómitos después de un ictus, y cada una requiere su propio tratamiento. Esto hace que un diagnóstico correcto sea fundamental para la recuperación.

Trabaje estrechamente con su equipo médico para realizar todas las pruebas necesarias para determinar la causa de los vómitos persistentes después de un ictus.

Para mejorar su comprensión, este artículo tratará las causas y los tratamientos de los vómitos después de un ictus.

Cómo entender las causas de los vómitos después de un ictus

Los vómitos persistentes después de un ictus deben tratarse como una emergencia médica. Si los pacientes pierden nutrientes y líquidos de forma constante, puede deteriorarse rápidamente su salud.

Puede ser peligroso autodiagnosticar y autotratarse los vómitos persistentes porque, si se sigue el tratamiento equivocado, puede retrasar la recuperación y empeorar la desnutrición. Trabajar con su equipo médico es crucial.

Aquí están las posibles causas de los vómitos después del ictus:

• Síndrome de vómitos cíclicos. Esta condición se caracteriza por episodios recurrentes de vómitos estereotipados separados por períodos regulares libres de síntomas. Los investigadores especulan que el síndrome de vómitos cíclicos se produce por una disfunción entre la conexión intestino-cerebro.
• Efectos secundarios de la medicación. Ciertos medicamentos pueden provocar vómitos en algunos pacientes con ictus. Preste atención al momento de la medicación y los vómitos. Compruebe las etiquetas para saber si hay efectos secundarios como náuseas y vómitos.
• Inicio de otro ictus. En raros casos, los vómitos podrían ser el signo de otro ictus. Por ello, ¡los vómitos deben considerarse una urgencia médica! Busque otros signos de advertencia de un accidente cerebrovascular, como dificultad para hablar y debilidad en un brazo o una pierna.
• Daños en ciertas áreas del cerebro después de un accidente cerebrovascular. Las náuseas y los vómitos se observan con frecuencia en pacientes con ictus vertebrobasilar. Además, los pacientes con ictus cerebelosos suelen experimentar vértigo grave, náuseas y vómitos, junto con un mal equilibrio.
• Trastornos vestibulares. Cuando el sistema vestibular se ve afectado por un ictus, puede causar problemas de equilibrio, alteración de la marcha, mareos, náuseas y vómitos.

A continuación, hablaremos de algunas opciones de tratamiento comunes que su médico puede sugerir.

¿Cómo se tratan los vómitos después de un ictus?

A menudo, se requiere hospitalización para los vómitos persistentes con el fin de reponer líquidos y proporcionar nutrientes esenciales. Durante la hospitalización, el equipo médico puede realizar las pruebas necesarias para diagnosticar cualquier condición subyacente.

Después del diagnóstico, estos son algunos de los tratamientos que un médico puede sugerir para tratar los vómitos después de un accidente cerebrovascular:

Imipramina y otros medicamentos antidepresivos tricíclicos

En un estudio de una paciente con ictus con síndrome de vómitos cíclicos, sus vómitos finalmente remitieron (84 días después) tras tomar clorhidrato de imipramina. Se trata de un antidepresivo tricíclico.

Se cree que los antidepresivos tricíclicos ayudan a los vómitos después del ictus debido a su impacto en el eje intestino-cerebro.

El intestino y el cerebro están en constante comunicación entre sí a través de este eje. Si esta comunicación se ha deteriorado después del ictus, mejorar esta conexión podría ayudar a aliviar los vómitos cíclicos después del ictus.

Ajuste de la medicación problemática

Si los vómitos son un efecto secundario de cualquier nueva prescripción que esté tomando, preste atención a cualquier patrón. Es posible que descubra que las náuseas aumentan después de tomar determinados medicamentos. Si observa alguna pauta, hable con su médico. (Es posible que pueda sustituir la medicación por otra más tolerable.

Entrenamiento de rehabilitación vestibular

Cuando las náuseas y los vómitos van acompañados de problemas de equilibrio, podría tratarse de un problema del sistema vestibular. En este caso, la rehabilitación vestibular puede ayudar.

Los ejercicios de rehabilitación vestibular están diseñados para ayudar a reentrenar el cerebro y el cuerpo para regular el sentido del equilibrio. En el mejor de los casos, esta terapia puede ayudar a reducir la sensación de náuseas y vómitos después del accidente cerebrovascular.

Remedios alternativos: Acupuntura y suplementos herbales

Los médicos pueden recomendar usar con precaución los remedios alternativos. No hay pruebas suficientes de que puedan ayudar, y prolongar el tiempo hasta el tratamiento efectivo podría exacerbar los efectos secundarios negativos de los vómitos a largo plazo.

Aún así, podría valer la pena probar los remedios alternativos, especialmente si se utilizan junto con su plan de tratamiento actual.

Un buen primer paso podría ser la acupuntura, que ha demostrado ayudar a reducir las náuseas y los vómitos relacionados con la quimioterapia. Aunque todavía no parece haber estudios para la recuperación del ictus, la acupuntura es un tratamiento de bajo riesgo. Si está desesperado por una solución, podría valer la pena probarlo.

Otro popular remedio natural utiliza hierbas chinas para la recuperación del ictus. Aunque los estudios clínicos parecen faltar aquí también, podría valer la pena probarlo si está interesado en un enfoque alternativo.

Superar las náuseas y los vómitos después del accidente cerebrovascular

Con muchas causas potenciales para los vómitos después del accidente cerebrovascular, es fundamental trabajar con un médico para un diagnóstico formal. Esto puede ayudar a agilizar el tratamientoy reducir al máximo los efectos secundarios negativos.

Se necesita más investigación en esta área, pero hasta ahora los antidepresivos tricíclicosofrecen una opción de tratamiento esperanzadora. Se pueden considerar remedios alternativos junto con la aprobación de su médico.

Esperamos que este artículo le proporcione algunas de las respuestas que estaba buscando en el camino hacia la recuperación.