Los pies. Son una parte del cuerpo a la que no prestamos demasiada atención, si es que lo hacemos. Es decir, a no ser que algo nos parezca raro o nos duela.
Abril es el Mes Nacional de la Concienciación sobre la Salud de los Pies, así que es un buen momento para asegurarse de saber cuáles son los problemas más comunes, así como cuándo hay que acudir al médico.
Aquí tienes algunas cosas que debes tener en cuenta:
Decoloración amarilla o marrón
«Generalmente quieres que los dedos de los pies sean claros y rosados. Cuando se presentan con otros colores como el negro o el marrón púrpura, amarillo o blanco, deben investigarlo», dijo a TODAY el Dr. Miguel Cunha, fundador de Gotham Footcare y podólogo en ejercicio con sede en Manhattan.
La decoloración más típica es el marrón amarillento y eso es lo que más a menudo indica que hay hongos en las uñas.
«Los hongos en las uñas son básicamente cuando el hongo, que es un organismo similar a un moho o una levadura, se alimenta de la piel muerta o de las uñas muertas», dijo. «Crece en ambientes oscuros y húmedos»
La decoloración de las uñas de los pies debida a los hongos puede tratarse a menudo con medicamentos de venta libre. Sin embargo, también puede extenderse a otros dedos del pie y puede requerir una pomada o medicación con receta.
La decoloración de las uñas también podría deberse a la diabetes, a la mala circulación o a una enfermedad cardíaca o pulmonar, según el Centro Médico de la Universidad de Pittsburgh.
Las uñas amarillas y quebradizas también podrían ser un signo de psoriasis ungueal, que provoca cambios en las uñas como la decoloración. Un estudio descubrió que entre el 80 y el 90 por ciento de las personas con psoriasis en placas también tienen psoriasis en las uñas. El envejecimiento también es una causa de decoloración de las uñas, que suelen adquirir un color gris o amarillo claro.
Debido a las diferentes causas potenciales de la decoloración de las uñas, es mejor que acuda a un podólogo para que lo compruebe. Si se trata de hongos en los dedos del pie, puede extenderse fácilmente a otros dedos si no se trata. Y si es un signo de algo más grave, es mejor saberlo, dijo Cunha.
Una raya marrón u oscura en la uña
Una raya o camino marrón u oscuro en la uña, o el oscurecimiento en la cutícula o la piel alrededor de la uña puede ser un signo de melanoma y debe tomarse en serio, especialmente si se está extendiendo a la piel.
Si la franja marrón o la decoloración se extiende al lecho de la uña del pie o a la piel, acuda a un podólogo o a un médico de inmediato. Además del melanoma, las rayas o manchas marrones en las uñas de los pies también pueden ser un signo de VIH o lupus, dijo Cunha.
«En los casos más avanzados, puede extenderse a la zona de la cutícula o a la piel que rodea la uña. Eso es un signo ominoso: significa que está creciendo y extendiéndose», según la Dra. Phoebe Rich, dermatóloga y directora de la Clínica de Trastornos de las Uñas de la Universidad de Ciencias y Salud de Oregón.
A veces, los afroamericanos y las personas con piel de color más oscuro tienen la pigmentación de su piel filtrada en el lecho ungueal. Además, los medicamentos de quimioterapia pueden causar manchas marrones en la uña. Pero insta a la gente a que lo compruebe, ya que podría ser necesaria una biopsia.
Uñas moradas y negras o manchas blancas
¡Las uñas moradas y negras suelen indicar que te has hecho daño! Cuando hay un traumatismo, como un golpe en el dedo del pie, se puede desarrollar un hematoma subungueal, que es el término médico para un moretón debajo de la uña del pie. Por lo general, desaparecerá con el tiempo, sin embargo, si teme haberse roto el dedo del pie, llame a su médico.
Las uñas que tienen manchas blancas también suelen ser una indicación de traumatismo en la uña, especialmente si practica deportes o corre con regularidad.
«Si eres corredor, una uña negra o morada podría significar que has desarrollado un microtraumatismo en el lecho ungueal llamado leuconiquia puntiforme, que es esencialmente un hematoma del lecho ungueal», dijo Cunha.
Las manchas blancas en la uña del pie no se deben a una deficiencia de vitaminas, como algunos piensan. En general, se puede esperar a que estas manchas desaparezcan gradualmente.
Talones secos y agrietados
Aunque los talones secos y agrietados pueden ser una señal de que el pie necesita humedad o una buena exfoliación con una piedra pómez, también podría ser un signo de pie de atleta.
«Los hongos en los pies (como el pie de atleta) pueden causar esa sequedad, esa descamación, sin causar la decoloración de las uñas de los pies. Muchas mujeres asumen que se trata de sequedad», dijo Cunha.
Pero si tienes los pies muy secos y escamosos, no descartes los hongos, sobre todo si es en invierno.
«En invierno, cuando la gente lleva zapatos cerrados, usa calcetines pesados, hay mucha más humedad, lo que puede provocar hongos o una infección», dijo.
Para evitar contraer el pie de atleta, evite caminar descalzo en los gimnasios y en las duchas públicas.
En algunos casos, los talones secos y agrietados también podrían ser un signo de diabetes o problemas de tiroides. Si sus talones secos y agrietados no responden a la crema hidratante o van acompañados de otros síntomas en los pies o en los dedos, consulte a un médico.
Dolor de pies, tobillos o espalda
«La gente simplemente mete los pies dentro de los zapatos», dijo Cunha. «A menudo descuidan los problemas de los pies o de los dedos».
«No deberías tener que vivir con dolor, creo que mucha gente simplemente asume que ‘Oh, puedo vivir con esto’, o ‘No es un problema'», dijo Cunha. «Pero se vuelve más difícil cuando pasa de ser un problema agudo a un problema crónico».
Cunha dijo que un problema común que ve es el de las personas que se esguinzan los tobillos y no los tratan adecuadamente con aparatos ortopédicos o fisioterapia. Los esguinces de tobillo no tratados pueden conducir a que los ligamentos que rodean el tobillo se aflojen, o al desarrollo de tejido cicatrizal, lo que puede conducir a esguinces de tobillo recurrentes o a un dolor duradero.
Para evitarlo, acuda a un médico si sufre un esguince de tobillo, y a un podólogo si tiene un dolor duradero o recurrente.
El dolor de espalda también puede estar relacionado con problemas en los pies.
«Su postura, su forma de andar, su locomoción, pueden estar relacionados con sus pies», dijo. «Si la base de tus pies no está bien, eso va a afectar a tus pies, tus tobillos y tu espalda».
«Creo que es importante prestar atención a tus pies», dijo.
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