¿Te has preguntado alguna vez cómo se hacen los esmaltes de uñas, o los ingredientes que los componen?
TODAY Style consiguió echar un vistazo entre bastidores a la fábrica de Zoya en Bedford, Ohio, donde la marca libre de crueldad idea todos sus colores y crea, embotella y envía sus esmaltes de uñas.
Zoya tiene más de 500 tonos -¡y contando! – y la directora creativa Rebecca Isa es el cerebro detrás de todos ellos.
Paso 1: Crear el color
Isa juega con los colores en su oficina o en el laboratorio, eligiendo entre muchos pigmentos líquidos y micas (polvos finos hechos de metales molidos o partículas de concha), que Isa llama «efectos especiales». Los añade a una base, y una vez que está satisfecha con el color y se somete a pruebas, se vuelve a crear en un lote más grande.
Dato curioso: aunque los colores de esmalte «de moda» cambian todo el tiempo, las cremas neutras son las más populares ahora mismo.
Muchos de los esmaltes llevan el nombre de mujeres poderosas de la historia y el arte – otros provienen de las sugerencias de clientes o empleados.
Paso 2: Mezclar los ingredientes
El lote más grande también pasa por pruebas (para asegurarse de que es el mismo esmalte en un clima sofocante que en Alaska, por ejemplo) y luego se vierte en un tanque, que hace girar el esmalte alrededor, preparándolo para el embotellado.
La empresa es conocida por fabricar esmaltes de uñas «saludables», y son libres de 10, lo que significa que no incluyen productos químicos potencialmente dañinos como el formaldehído, los parabenos o el plomo.
Paso 3: Embotellado
Antes de introducir el esmalte, se deja caer un cojinete de bolas en cada frasco, que es la diminuta bola metálica que se oye agitar al agitar el frasco. Ayuda a mezclar el esmalte.
Una máquina bombea el color en botellas de cristal. Una máquina puede llenar hasta 170 botellas en un minuto. Normalmente, Zoya produce unas 170.000 botellas de esmalte al día.
Paso 4: Cepillos y tapas
La misma máquina aplica cepillos y tapas. A medida que cada botella continúa en la línea de montaje, los empleados se aseguran de que estén en perfecto estado antes de disponerlas en una caja.
Paso 5: Envasado
Los esmaltes se llevan a una estación de envasado, donde obtienen códigos de barras y números de serie, y se colocan en cajas individuales.
Un ordenador clasifica los esmaltes en pedidos antes de empaquetarlos y enviarlos a salones y hogares de todo el mundo
Esta historia forma parte de una serie de TODAY llamada «The Follow», en la que investigamos cómo se crea un producto de principio a fin. Hemos entrado en las fábricas de LUSH, Burt’s Bees, Crayola y otras. ¡Echa un vistazo a cómo se fabrican las velas Yankee en el siguiente vídeo!
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