Andrew Coughlin MD, Aru Panwar MD, Carla DeLassus Gress, Sc.D., MS, CCC-SLP, Elizabeth VanWinkle MS, CCC-SLP

¿Qué es?

La disfagia se refiere a la dificultad para tragar. Aunque la disfagia puede tener muchas causas, a menudo es el resultado de la formación de tejido cicatricial que contribuye a un estrechamiento en la garganta o el esófago. Este estrechamiento se denomina «estenosis». Los pacientes que padecen disfagia también pueden sufrir «aspiración», que es una condición en la que los alimentos, los líquidos o la saliva se filtran involuntariamente a la tráquea.

¿Qué frecuencia tiene entre los pacientes con cáncer de cabeza y cuello?

La disfagia es bastante frecuente en los pacientes con cáncer de cabeza y cuello y en los supervivientes. En un estudio de pacientes con cáncer de cabeza y cuello, el 45,% observó disfagia, el 10,2% estenosis y el 8,7% neumonía por aspiración. En otro estudio, 1 de cada 2 pacientes informó de una disminución de su calidad de vida debido a la disfagia.

Los pacientes pueden experimentar diversos grados de dificultad para tragar debido a los efectos del cáncer, su tratamiento y los efectos secundarios relacionados con el tratamiento. Por ejemplo, los tumores pueden impedir que los alimentos o los líquidos pasen de la boca y la garganta al esófago. La cirugía para extirpar los tumores también puede eliminar o dañar los tejidos que son importantes para la función de deglución. La radiación o la combinación de radiación y quimioterapia pueden causar una inflamación importante y llagas en la boca (mucositis) durante la terapia, provocando dolor al tragar (odinofagia). La cirugía o la radiación pueden causar hinchazón (edema o linfedema) o cicatrización (fibrosis) del revestimiento de la boca y la garganta, lo que provoca una disminución de la función de deglución. La cicatrización puede llegar a ser tan grave que se produzca una estenosis (estrechamiento del esófago que bloquea el paso de los alimentos al estómago). Otros problemas comunes en los pacientes con cáncer de cabeza y cuello que también pueden causar problemas de deglución son: sequedad de boca por la radiación que hace que los alimentos sean pegajosos, pérdida de dientes o prótesis dentales mal ajustadas que causan problemas de masticación, cambios de sabor y una pérdida o cambio de sensibilidad que altera la forma en que el paciente come.

¿Cuáles son los signos/síntomas?

Los signos o síntomas de la disfagia son muy variables. Un paciente puede experimentar:

  1. Tos o atragantamiento al comer o beber
  2. Sensación de que la comida se atasca
  3. Alimentos o líquidos que entran o salen por la nariz al tragar
  4. Disminución de la capacidad para masticar o tragar sólidos
  5. Pérdida de peso involuntaria
  6. Aumento del tiempo necesario para comer una comida
  7. .

  8. Defracción al tragar
  9. Dificultad para tragar píldoras o comprimidos
  10. Neumonías recurrentes por aspiración

Mantener una nutrición equilibrada y una hidratación adecuada es una prioridad absoluta durante y después del tratamiento del cáncer para promover una curación y recuperación adecuadas con un mínimo de complicaciones. Los pacientes que tienen dificultades para tragar suelen perder peso. Si los alimentos entran en el tubo respiratorio (aspiración) puede producirse una neumonía u obstrucción. Si los pacientes no pueden mantener el peso con la nutrición por vía oral o sufren aspiración, puede ser necesaria una sonda de alimentación.

¿Cómo se diagnostica la enfermedad?

La presencia de disfagia puede establecerse a menudo mediante la historia de los síntomas del paciente. Para comprobar completamente la función de la deglución, pueden solicitarse pruebas adicionales.

  1. Esofagrama con bario: Se trata de una prueba radiográfica que puede utilizarse para identificar el estrechamiento del tubo de deglución. Un radiólogo realiza este examen. Se pide a los pacientes que traguen un tinte radiopaco (bario) mientras se obtienen imágenes de rayos X para evaluar las zonas estrechas o las anomalías de la función de deglución.
  2. Deglución de bario modificada: Se trata de una prueba en la que el radiólogo y el logopeda evalúan su capacidad para tragar diferentes consistencias de alimentos (líquidos finos, líquidos espesos y sólidos) utilizando radiografías como una película. Si se descubre que tiene una anomalía en la deglución, el logopeda intentará determinar si hay formas de compensar la pérdida funcional (maniobras de deglución compensatorias). Estas maniobras pueden mejorar su capacidad para tragar y prevenir o reducir los eventos de aspiración.
  3. Evaluación Endoscópica Fibroóptica de la Deglución (FEES): Se trata de un procedimiento de consulta en el que los proveedores observan directamente la función de la deglución utilizando un visor flexible a través de la nariz. Permite al clínico identificar directamente por dónde van los alimentos y dónde es difícil el paso, evitando la exposición a la radiación. Se pueden crear grabaciones de vídeo, que también pueden utilizarse como herramienta para proporcionar información interactiva al paciente sobre su capacidad o incapacidad para tragar alimentos y líquidos.

¿Cómo se trata la afección?

Para los pacientes tratados con radioterapia o con una combinación de quimioterapia y radioterapia, los estudios han demostrado que si se siguen utilizando los músculos y estimulando los tejidos de la garganta durante el tratamiento se consigue mejorar la función de deglución. Es fundamental que siga comiendo y bebiendo, en la medida de sus posibilidades, mientras dure la terapia contra el cáncer. De este modo mantendrá los músculos fuertes y los tejidos más sanos. Su equipo de tratamiento, que suele incluir un dietista y un logopeda, le ayudará a determinar qué alimentos serán más fáciles de tragar. Si consideran que la función de deglución es deficiente, pueden recomendar el uso de una sonda de alimentación para obtener suficientes calorías. Incluso si se requiere una sonda de alimentación, seguir tragando y realizando ejercicios de deglución es de suma importancia.

Si desarrolla disfagia, se recomienda que acuda a un logopeda. Se trata de personas capacitadas para comprobar la función de la deglución, ofrecer recomendaciones sobre una dieta segura y realizar una terapia de deglución. La terapia para la disfagia puede consistir en un programa de ejercicios específicos para recuperar la fuerza y la amplitud de movimiento de las estructuras de la deglución, o en el entrenamiento en el uso de maniobras compensatorias para mejorar la eficacia de la deglución y evitar la aspiración. La terapia puede ser de corta duración o requerir varios meses. El éxito es posible y, afortunadamente, la mayoría de los pacientes pueden volver a comer por la boca, aunque puede ser necesario modificar la dieta. La fisioterapia y los dispositivos de movimiento pasivo pueden ayudar a aliviar la reducción de la apertura de la mandíbula (trismo) resultante de los tratamientos de radiación. Si se desarrolla una estenosis, un examen con cámara del conducto alimentario y la dilatación en el quirófano pueden proporcionar una mejora significativa.

A largo plazo, la mayoría de los pacientes evolucionan muy bien y retoman una dieta normal o casi normal con la terapia adecuada. Sin embargo, algunos pacientes pueden experimentar problemas de deglución a largo plazo que afectan a los tipos de alimentos que pueden comer. Un pequeño porcentaje de pacientes tiene problemas graves de deglución que requieren el uso de una sonda de alimentación permanente. La formación de tejido cicatricial puede afectar a la función de deglución meses o años después de finalizar el tratamiento. Cada paciente es diferente y, por tanto, el diagnóstico y la terapia se determinan de forma individual.

¿Cuándo debo llamar a mi médico?

Las cosas que deberían llevarle a llamar a su médico incluyen:

  1. Incapacidad para comer cosas que solía disfrutar
  2. Tos persistente o atragantarse con la comida
  3. Neumonías recurrentes
  4. Nuevo dolor al comer
  5. Pérdida de peso inexplicable
  6. Cambio inexplicable en las consistencias de los alimentos que puede comer
  7. Disminución del placer al comer

¿Dónde puedo obtener más información?

Módulo de aprendizaje para pacientes sobre la disfagia. Oral Cancer Foundation

Problemas de deglución después del cáncer de cabeza y cuello. American Speech-Language- Hearing Association

Hutcheson, K.A. et al. 2-Year Prevalence of Dysphagia and Related Outcomes in Head and Neck Cancer Survivors: Un análisis actualizado de SEER-Medicare. International Journal of Radiation Oncology, Biology and Physics , Volume 99 , Issue 2 , E342

Garcia-Peris P, Paron L, Velasco C, et al. Long-term prevalence of oropharyngeal dysphagia in head and neck cancer patients: Impacto en la calidad de vida. Clin Nutr. 2007 Dec;26(6):710-7.

Rosenthal DI, Lewin JS, Eisbruch A. Prevention and treatment of dysphagia and aspiration after chemoradiation for head and neck cancer. J Clin Oncol. 2006;24(17):2636-2643

Compartir: