(CNN) Al presidente Donald Trump le quedan menos de dos semanas en el cargo, pero después de que fomentara un asalto por parte de los alborotadores en el Capitolio de Estados Unidos, los demócratas de la Cámara de Representantes están planeando presentar una resolución de destitución, a menos que el vicepresidente Mike Pence y el gabinete invoquen la 25ª Enmienda para destituir a Trump primero.
La impugnación de Trump podría ser el remedio adecuado y el uso de la impugnación para destituirlo le impediría presentarse de nuevo a la presidencia. (Recordatorio: Trump ya fue sometido a un juicio político por la Cámara por sus actividades en Ucrania, pero no fue destituido por el Senado.)
Pero el juicio político lleva tiempo, y podría no aprobarse. La 25ª Enmienda, que se ha discutido periódicamente como un medio de último recurso para destituir a un presidente rebelde o incapacitado, sería una ruta más rápida para destituir a Trump.
Algunos miembros del Gabinete mantuvieron discusiones preliminares sobre la invocación de la 25ª Enmienda para forzar la destitución de Trump, dijo una fuente del GOP a Jim Acosta de CNN la semana pasada, y Pence no lo ha descartado.
Pero el listón que establece es increíblemente alto.
¿Qué requeriría?
Para arrebatarle el poder a Trump por la fuerza, Pence tendría que estar a bordo, según el texto de la enmienda. Lee el texto completo aquí. Pence también necesitaría que la mayoría de los funcionarios del gabinete de Trump estuvieran de acuerdo en que el presidente no es apto para el cargo y le arrebataran temporalmente el poder.
Trump podría disputar su movimiento con una carta al Congreso. Pence y el Gabinete tendrían entonces cuatro días para impugnarlo, el Congreso votaría entonces -se requiere una supermayoría de dos tercios, normalmente 67 senadores y 290 miembros de la Cámara de Representantes- para destituirlo permanentemente.
El Congreso también podría nombrar su propio órgano para revisar la aptitud del Presidente en lugar del Gabinete. La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, presentó durante el último Congreso un proyecto de ley para crear un órgano del Congreso con este fin, pero no se convirtió en ley.
¿Por qué tenemos la 25ª Enmienda?
La 25ª Enmienda se promulgó tras el asesinato de John F. Kennedy, cuyo predecesor, Dwight Eisenhower, sufrió importantes ataques al corazón. Su objetivo era crear una línea clara de sucesión y prepararse para contingencias urgentes.
Eisenhower sufrió un debilitante ataque al corazón mientras ocupaba el cargo en la década de 1950. Eso fue antes de la 25ª Enmienda, por lo que no había ninguna norma constitucional. En cambio, llegó a un acuerdo con el vicepresidente Richard Nixon sobre la entrega del poder.
La parte de la 25ª Enmienda que permite al vicepresidente y al Gabinete destituir al presidente tenía en mente a un líder que estuviera en coma o sufriera un derrame cerebral.
El gobierno de Reagan redactó, pero no firmó ni transmitió, cartas al Senado que habrían quitado el poder a Reagan después de que le dispararan en 1981. Se pueden ver en la página web de la Biblioteca Reagan.
El asalto al Capitolio por parte de alborotadores a petición del presidente puede acabar siendo la primera contingencia de este tipo en la historia del país.
En su comparecencia en la CNN mientras los alborotadores eran desalojados del Capitolio, el historiador presidencial Douglas Brinkley dijo que nunca pensó que estaría discutiendo seriamente la destitución de un presidente que suponía un peligro para la República.
«Nuestro país está siendo rehén ahora mismo de Donald Trump», dijo. «Mitch McConnell y la presidenta Pelosi ni siquiera pueden reunirse en el Capitolio hoy … así que creo que ahora tenemos que ir a nuestra bolsa de kit constitucional y encontrar lo que podemos hacer para controlar a Donald Trump y, ciertamente, la 25ª Enmienda está ahí».
Este explicador ha sido actualizado para reflejar las novedades.
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