Objetivos: 1) Comparar dos métodos publicados para estimar la presión pleural, uno basado en la presión esofágica medida directamente y el otro basado en la elastancia de la pared torácica. 2) Evaluar la concordancia entre dos estrategias publicadas de optimización de la presión positiva al final de la espiración basadas en estos métodos, una dirigida a una presión transpulmonar basada en la presión esofágica al final de la espiración de 0 cm H2O y la otra dirigida a una presión transpulmonar basada en la elastancia al final de la inspiración de 26 cm H2O.

Diseño: Estudio retrospectivo con datos clínicos.

Entorno: UCIs médicas y quirúrgicas.

Pacientes: Sesenta y cuatro pacientes ventilados mecánicamente por insuficiencia respiratoria aguda con balones esofágicos colocados para su manejo clínico.

Métodos: Los métodos basados en la presión esofágica y la elastancia de la pared torácica para estimar la presión pleural y establecer la presión positiva al final de la espiración se aplicaron retrospectivamente a cada uno de los 64 pacientes. En los pacientes que fueron ventilados a dos niveles de presión positiva al final de la espiración, se calcularon las elastancias de la pared torácica y del sistema respiratorio en cada nivel de presión positiva al final de la espiración.

Mediciones y resultados principales: Las estimaciones de la presión pleural utilizando ambos métodos fueron discordantes y difirieron hasta en 10 cm H2O para un determinado paciente. Las dos estrategias de optimización de la presión positiva al final de la espiración recomendaron cambios de presión positiva al final de la espiración en direcciones opuestas en el 33% de los pacientes. Los niveles ideales de presión positiva al final de la espiración recomendados por los dos métodos para cada paciente eran discordantes y no estaban relacionados (R = 0,05). Las elastancias de la pared torácica y del sistema respiratorio crecieron con los aumentos de la presión positiva al final de la espiración en los pacientes con presiones transpulmonares basadas en la presión positiva al final de la espiración (p < 0,05).

Conclusiones: Los métodos basados en la presión esofágica y en la elastancia de la pared torácica para estimar la presión pleural no dan resultados similares. Las estrategias de apuntar a una presión transpulmonar basada en la presión esofágica al final de la espiración de 0 cm H2O y de apuntar a una presión transpulmonar basada en la elastancia al final de la inspiración de 26 cm H2O no pueden considerarse intercambiables. Por último, las elastancias de la pared torácica y del sistema respiratorio pueden variar de forma imprevisible con los cambios en la presión positiva al final de la espiración.