Si está en medio de la menopausia, probablemente haya experimentado uno o dos sofocos en el camino. Los sofocos y los sudores nocturnos son síntomas comunes de la menopausia, y pueden ser incómodos y a veces incluso debilitantes.

Muchas mujeres descubren que los síntomas de la menopausia en general, y los sofocos en particular, tienden a empeorar por la noche. Pero, ¿qué tiene la noche que hace que los síntomas de la menopausia empeoren? Estos son algunos de los factores en juego.

Cambios hormonales durante el día

Los cambios en sus niveles hormonales ayudan a desencadenar los sofocos asociados a la menopausia. A medida que sus niveles hormonales suben y bajan, puede experimentar cambios en su temperatura corporal, junto con los sofocos asociados.

Los niveles hormonales no se mantienen estables a lo largo del día: suben y bajan. Para muchas mujeres, estos cambios hormonales durante el día son peores después de que se ponga el sol, haciendo que los sofocos existentes sean más intensos o desencadenando nuevos sofocos, y sudores nocturnos, durante la tarde y la noche.

Consumo de cafeína

Para muchas mujeres, el consumo de cafeína hace que los síntomas de la menopausia, incluyendo los sofocos, sean mucho peores. Si usted experimenta frecuentes sudores nocturnos y sofocos severos en las horas de la noche, es posible que desee limitar el consumo de bebidas con cafeína después de la cena.

Como mínimo, haga un experimento para ver si el consumo de cafeína tiene un impacto en sus sofocos. Si descubre que beber café, té, refrescos y otras bebidas con cafeína empeora sus sofocos, limitar su consumo en las horas nocturnas podría ser de gran ayuda.

Problemas con su entorno de sueño

Si sus sofocos empeoran por la noche, hay cosas que puede hacer para sentirse más cómoda, empezando por cambiar su entorno de sueño. Si le molestan los sudores nocturnos y los sofocos nocturnos, pruebe a añadir un aire acondicionado a su dormitorio o a dormir junto a un ventilador grande. Puede que no haga desaparecer los sofocos, pero refrescar el dormitorio puede, al menos, hacerle sentir más cómoda.

Si experimenta algún cambio en los síntomas de la menopausia, es importante que hable con su médico. Debe mantener a su médico informado sobre todos los síntomas de la menopausia, incluidos los sudores nocturnos y los sofocos. Su médico necesita saber no sólo lo que experimenta sino también cuándo, para poder desarrollar un plan de tratamiento eficaz, que la mantenga cómoda a medida que su cuerpo cambia.