Linfadenopatías reactivas Resumen. La linfadenopatía, es decir, el aumento de tamaño de los ganglios linfáticos, es un hallazgo relativamente frecuente tanto en niños como en adultos y en la gran mayoría de los casos corresponde a cambios reactivos que desaparecen espontáneamente en varias semanas. En los casos en los que el aumento de tamaño de los ganglios linfáticos es marcado o persistente, o en los que la presentación clínica es inusual, se justifica una investigación más exhaustiva, que se basa, además de en los hallazgos clínicos, de laboratorio y radiológicos, en el examen histológico del ganglio linfático aumentado de tamaño, que es la tarea crucial para discriminar entre procesos malignos y benignos. La importancia capital de esto queda ilustrada por el hecho de que las linfadenopatías reactivas confundidas con linfomas se encuentran entre los tipos de cáncer más frecuentemente mal diagnosticados. Por otra parte, el reconocimiento de patrones histopatológicos más o menos específicos de los cambios reactivos sirve para acotar las distintas causas potenciales, incluidas aquellas que de otro modo sólo se reconocerían mediante el uso de técnicas auxiliares que requieren muchos recursos. Por lo tanto, cuanto más estrecho sea el diagnóstico diferencial basado en el examen histopatológico, más específica y eficiente puede ser la aplicación de estas técnicas. Esta revisión ofrece un resumen de las características histopatológicas esenciales de algunas de las linfadenopatías reactivas más comunes y mejor caracterizadas. Tras una descripción de los patrones morfológicos más importantes de los cambios en los ganglios linfáticos, discutiremos los cuadros clínicos individuales, desde los procesos infecciosos e idiopáticos hasta las enfermedades autoinmunes y los cambios asociados a fármacos.