Will Smith y Jada Pinkett Smith tienen un estilo de crianza poco convencional que a menudo es criticado en los medios. Son famosos por dejar que sus hijos, Jaden y Willow Smith, hagan lo que quieran. Los críticos avergonzaron a Jada por permitir que Willow se afeitara la cabeza a una edad temprana y por dejar que Jaden modelara faldas para Louis Vuitton.
Sin embargo, sea lo que sea lo que hacen los padres Smith, es evidente que mantienen a sus hijos muy cerca de ellos. Son una familia muy unida, por lo que resulta sorprendente que Jada guardara tanto dolor de su padre, Robosol Pinkett, Jr. Ella y el difunto actor tuvieron una pelea «horrenda» antes de que él muriera, recordó Jada.
El padre de Jada Pinkett Smith tuvo problemas con las drogas y el alcohol
La madre de Jada, Adrienne «Gammy» Norris-Banfield, y su padre, Robsol Pinkett Jr., la tuvieron cuando eran adolescentes en el instituto. Se casaron jóvenes y sólo permanecieron juntos por poco tiempo. Jada era un bebé cuando se divorciaron.
Su padre también tuvo otro hijo, Caleeb Pinkett, pero dejó a su madre cuando tenía dos años. Robsol llegó a adoptar un niño más tarde en su vida, en un momento en el que estaba sobrio. La estrella de Matrix invitó a su hermanastro, Caleeb, a su programa de entrevistas, Red Table Talk, para hablar de lo difícil que es para ambos perdonar a su padre.
«Me dijo: ‘Prefiero drogarme que ser tu padre'», recuerda Caleeb sobre Robsol, fallecido en 2010.
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Jada recuerda lo mucho que Robsol luchó con las drogas y el alcohol toda su vida. Ella recuerda que él «cayó del carro» muchas veces a lo largo de su vida.
«Me dijo a los 7 años», añade Jada. «‘No puedo ser tu padre. Soy un criminal. Soy un adicto, y eso es lo que es'»
Tanto Jada como Caleeb guardaban mucho resentimiento hacia su padre. Antes de que muriera, los hermanos intentaron ayudarle tras una recaída, pero les costó perdonarle.
Jada lamenta la «horrible pelea» que tuvo con su padre antes de que muriera
En un momento de la vida de Robsol, Caleeb le dijo a su hermana que tenían que llevar a su padre a California porque había vuelto a recaer. A Jada le costó darse cuenta de ello, pero lo hizo igualmente porque sabía que él necesitaba ayuda.
«Teníamos esa sensación de que teníamos que ser responsables de él, pero él no necesitaba ser responsable de nosotros», recuerda Jada.
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También odia que él quisiera formar una relación con ella cuando «llegó a la posición» en la que se encuentra con su fama y fortuna en Hollywood. Sin embargo, después de ayudar a Robsol a recuperar la sobriedad, no tardó en recaer. La última vez fue una sobredosis, y murió.
«La parte más difícil de que muriera así es porque él y yo habíamos tenido una pelea horrible cuando me enteré de que había recaído», lamenta Jada. «Me decía: ‘No te debo nada’. No hiciste una mierda por mí. No hiciste una mierda por Caleeb. No te debo nada’. Fue uno de esos.»
Su hermano tuvo la misma conversación con su padre; sin embargo, Robsol dijo, «Eso es la enfermedad. Eso es lo que soy»
Caleeb y Jada se dieron cuenta de que la adicción no tenía que ver con ellos. Tenían que perdonarse primero a sí mismos para perdonar a su padre.
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