¿Qué se analiza?

La prueba de gonadotrofina coriónica humana (hCG) suele utilizarse para confirmar o controlar un embarazo. También se conoce como prueba de embarazo. Puede ser una prueba de sangre o de orina.

Esta prueba mide la cantidad de la hormona hCG en la orina o en la sangre. Esta hormona suele estar presente sólo cuando una mujer está embarazada. Comienza a ser producida por la placenta después de que el óvulo fecundado se implante en el útero.

Ocasionalmente, las mujeres también pueden tener tumores abdominales que producen hCG.

Los kits de prueba de embarazo caseros, que se pueden comprar en supermercados y farmacias, analizan la hCG en la orina. La prueba de orina puede detectar la hCG a partir de la primera falta de menstruación.

La prueba de hCG en sangre puede detectar el embarazo antes, aproximadamente una semana después de la concepción.

¿Por qué necesito esta prueba?

Su médico puede utilizar la prueba de hCG en sangre para comprobar si está embarazada, para confirmar un resultado positivo de la prueba de hCG en orina o para controlar su embarazo. El análisis de sangre es más sensible que el de orina y los resultados pueden ayudar a su médico a determinar cuándo nacerá el bebé y a descubrir si el embarazo se está desarrollando con normalidad o no.

Los análisis de hCG en sangre también se utilizan para detectar o controlar los tumores que producen hCG. Si el nivel de hCG aumenta, esto sugiere que el tumor está creciendo. Si baja, sugiere que el tumor se está reduciendo.

Cómo prepararse para esta prueba

No se requiere ninguna preparación especial.

Cómo entender sus resultados

Normalmente, los niveles de hCG aumentan rápidamente al principio del embarazo. Pero si algo va mal en el embarazo, sus niveles de hCG pueden ser más altos o más bajos de lo esperado.

Si tiene un tipo de tumor que eleva su nivel de hCG, como un tumor de células germinales, su médico podría utilizar la prueba de hCG para ver si el tratamiento está funcionando o si el tumor ha vuelto después del tratamiento.