Groucho Marx no perdonó a nadie – y su biógrafo tampoco se anda con rodeos

Aunque no todo el mundo ha visto las películas de Groucho Marx, mucha gente reconocería al cómico. Sus pobladas cejas negras, su espeso bigote y su omnipresente puro han sido durante mucho tiempo un icono.

Marx era conocido por apuntar con frecuencia a los ricos y poderosos en sus comedias, pero una nueva biografía sugiere un lado más siniestro de Julius «Groucho» Marx.

«La imagen convencional de Groucho era que estaba del lado de los pequeños, y que hablaba de forma desafiante e insolente a los poderosos y a los ricos», afirma Lee Siegel, autor de Groucho Marx: The Comedy of Existence, explica a Michel Martin de NPR. «Pero mi sensación es que Groucho quería desinflar a todo el mundo, que era un misántropo integral».

Siegel dice que su obra pretendía ir más allá de la imagen comúnmente aceptada del cómico, y encontrar al hombre detrás del icono.

«Quería llegar a las raíces de su humor, y quería llegar a lo que le convirtió en un icono», dice Siegel. «No me gusta la palabra ‘icono’, porque agota todas las energías que lo convirtieron en un icono».

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Sobre la famosa frase de Marx, «Nunca querría formar parte de un club que me tuviera como miembro»

Woody Allen presenta la frase como una especie de epítome del autodesprecio judío. Pero eso no es lo que la línea significa en absoluto.

Groucho escribió esa línea en una famosa carta de renuncia a un club del que se sentía superior. Fue admitido en un club de Beverly Hills, y llegó a este club pensando que iba a hablar con otras figuras ilustres sobre todos los grandes de la literatura. Quería ser un escritor y un literato serio, Groucho, toda su vida. Así que pensó que podría hablar de Chaucer y Milton y Shakespeare.

En cambio, llega allí y todos están bebiendo y jugando a las cartas, y como él dice, están hablando por teléfono con las esposas de los demás.

Sobre la actitud de Marx hacia las mujeres

Su misoginia es implacable y exhaustiva, y es muy difícil de tolerar. Sus ataques a Margaret Dumont se concretan casi siempre en atacar su condición de mujer.

Y es muy extraño que siga atacándola, porque por supuesto ella puede ser rica y puede ser algo despistada y puede estar hinchada de su propia virtud – pero en realidad es bastante amable, y una persona inofensiva que sólo quiere ayudar a estos impostores que Groucho está habitando.

Pero él sigue insultándola por ser mujer. Y no encuentras lo mismo en Chaplin o en Laurel y Hardy o en W.C. Fields, pero con los hermanos Marx, sí, llevaron el odio a la mujer a un nivel completamente nuevo. Es difícil de ver.

Sobre por qué Marx es relevante hoy en día

Bueno, en términos de comedia se puede trazar una línea recta desde Groucho a cómicos como Amy Schumer y Tig Notaro, por todo el odio a la mujer de Groucho. Son personas muy divertidas, pero no siempre lo son. Y a veces dirán algo que simplemente es chocante, y la única respuesta biológica que está disponible para ti es la risa.

Es lo mismo con Groucho. Lo que él es, es chocante. Presenta el espectáculo, él y sus hermanos, de personas que se comportan en público como si estuvieran en privado. Están diciendo cosas al público que normalmente la gente sólo dice a sus amigos más cercanos o a sus terapeutas. Y los hermanos Marx fueron los primeros en hacerlo.

Si le sigue gustando Marx, después de su trabajo en la biografía

Supongo que lo que siento es que tengo dos hijos y los quiero hagan lo que hagan. Pero no siempre quiero a los hijos de los demás. Así que a veces los hermanos Marx son mis hijos y a veces son los hijos de otras personas. Supongo que eso es lo que siento por ellos.

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