Lectura de obras del filósofo francés Michel Foucault, Graham Pressley habla de su identidad como delincuente convicto en uno de sus vídeos de YouTube

Mientras los miembros de la comunidad de Santa Bárbara y de fuera de ella manifiestan reacciones encontradas ante la noticia de que Jesse Rugge ha obtenido la libertad condicional y ha salido de la cárcel esta semana -Rugge fue condenado por secuestro en relación con el asesinato de Nicholas Markowitz en el año 2000 y cumplió 11 años de una sentencia de cadena perpetua-, uno de sus coacusados ha tomado la blogosfera para exponer sus opiniones sobre ese anuncio, su propia criminalidad, y una variedad de otros temas como el alcohol y la introspección.

«A la mierda, lo diré», escribió Graham Pressley el 20 de octubre en su blog, Underground Santa Barbara. «Estoy jodidamente extasiado. Mi hijo va a salir. Vuelve a casa. Estará en libertad condicional para siempre… pero al menos vuelve a casa. Después de, bueno, más de una década de complacer y decir la verdad que mi padre y su padre y el puto padre de todos querían que vomitáramos… puedo decir con confianza una cosa, y muy fuerte: QUE SE JODA LA POLICÍA. Los retrasados se equivocan». Pressley también ha creado varios testimonios en YouTube, pero no respondió a las múltiples solicitudes de entrevista sobre sus declaraciones públicas.

Jesse Rugge
Foto de cortesía

«Por fin han encontrado a su pareja», continúa en el mismo post. «Lo siento chicos. No podía cortarlo, ¿verdad? Ouch. Supongo que realmente hace la diferencia… ser inteligente y todo eso… Por supuesto que sí. Por supuesto que sí. Y por supuesto, en Santa Bárbara, también ayuda ser blanco, delgado, bonito y, bueno, haber tropezado con el mejor abogado de la defensa pública que el Estado de California haya visto jamás. Ah, y tener la verdad de nuestro lado… casi se nos olvida mencionar que….»

Pressley, de 17 años en el momento del asesinato, ayudó a cavar la tumba poco profunda cerca de Lizard’s Mouth donde fue enterrado Markowitz, de 15 años, tras ser abatido por Ryan Hoyt, que actuaba bajo la dirección del líder del grupo y traficante de drogas de poca monta, Jesse James Hollywood. Hollywood, Rugge y otro miembro de su banda habían secuestrado a Markowitz cerca de su casa de Los Ángeles porque el hermanastro de Markowitz no había pagado una deuda de 1.200 dólares de dinero de la droga que tenía con Hollywood. El grupo viajó a Santa Bárbara y pasó un tiempo con Pressley y otros en varias casas y lugares antes de que Hoyt recibiera la orden de matar al adolescente.

Pressley y sus secuaces serían arrestados poco después de que unos excursionistas descubrieran el cuerpo de Markowitz. Pressley fue juzgado como adulto en 2002 y fue absuelto de secuestro. Cuando el jurado no pudo llegar a un veredicto sobre el cargo de asesinato, Pressley fue juzgado de nuevo tres meses después y condenado por asesinato en segundo grado. Originalmente se enfrentaba a 18 años de prisión, pero fue condenado como menor de edad después de una fuerte presión por parte de su abogado defensor, Michael Ganschow, y después de que el ex sheriff del condado de Santa Bárbara, James Thomas, interviniera en su favor. «No estoy tan seguro de que pudiera sobrevivir en un centro estatal para adultos», escribió entonces Thomas al juez William Gordon. Pressley, que ahora tiene 30 años, fue liberado de un centro de la Autoridad Juvenil de California en 2007.

Desde entonces, Pressley -una cuarta generación de Santa Bárbara cuyo bisabuelo Charles Pressley cofundó Old Spanish Days en 1924- ha incursionado en la industria del vino de la Costa Sur, iniciando el negocio de degustación y venta La Tour Wine Merchants en 2011. Pressley acabó trasladando La Tour a The Pub, pero el bar de Helena Street ha cerrado desde entonces en medio de acusaciones de mala conducta financiera lanzadas entre Pressley y sus socios. No está claro si La Tour sigue funcionando; el dominio de su página web expiró a principios de este mes. Más recientemente, Pressley renovó un espacio cerca del Museo del Surf de Santa Bárbara y, al parecer, planea abrir un bar de vinos fuera de horario.

En los últimos años, Pressley ha tenido múltiples contactos con la policía de Santa Bárbara, pero ninguno de los incidentes resultó en cargos criminales. Este verano, los propietarios de Sama Sama Kitchen en State Street llamaron a la policía después de que Pressley amenazara a uno de sus empleados. La disputa, según el portavoz de la policía de Santa Bárbara, el sargento Riley Harwood, tuvo que ver con que la ex mujer de Pressley había entablado una relación con uno de los empleados del restaurante.

Harwood dijo que un gerente de Sama Sama, al enterarse de que Pressley se dirigía al restaurante con su ex mujer alrededor de las 6:30 de la tarde del 29 de junio, se quedó fuera del local para impedirle la entrada. Según Harwood, Pressley le dijo al gerente que iba a herir y matar al empleado, pero abandonó el lugar antes de que llegaran los agentes. Pressley detalló la cobertura de EdHat de las comunicaciones del escáner policial en su blog esta semana, escribiendo: «Creo que se trataba de mi intento de frecuentar el restaurante de un amigo y de los niños que, por razones que prefiero no hacer públicas, tenían miedo de un hombre de 30 años de edad y de 140 libras de peso. Hmm.»

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