Los audiólogos se refieren a la pérdida de audición durante unos segundos y luego a su regreso como pérdida de audición neurosensorial repentina (SSHL) o sordera repentina. La referencia a la sordera puede confundir a algunas personas que podrían asumir que es una condición permanente. Afortunadamente, ese no suele ser el caso.

El fenómeno de la pérdida de audición puede producirse de forma repentina o varias veces a lo largo de un periodo de varios días. Como resultado, las personas tienden a asumir que tienen una condición como la acumulación de cera en el oído o una infección sinusal en lugar de SSHL. Esto puede impedirles buscar un tratamiento a tiempo.

Estadísticas sobre el SSHL

El noventa por ciento de las personas con pérdida de audición lo experimentan en un solo oído. El SSHL afecta a unas 5.000 personas en Estados Unidos cada año. Aunque tradicionalmente ha sido más común entre las personas de 40 y 50 años, los audiólogos están viendo una afluencia constante de pacientes más jóvenes debido a la exposición a ruidos fuertes.

Las personas que buscan un tratamiento rápido para el SSHL recuperan su audición completa en dos semanas en el 85 por ciento de los casos. Suelen acudir a un otorrinolaringólogo o a un audiólogo para el diagnóstico y el tratamiento. Algunos de los primeros indicios del SSHL incluyen un sonido de chasquido en el oído, dificultad para oír por un oído, mareos o un zumbido en el oído conocido como tinnitus.

Se estima que hasta el setenta por ciento de las personas que experimentan SSHL también sufren síntomas de tinnitus. Además, el cincuenta por ciento de ellos experimenta vértigo.

¿Por qué mi audición va y viene?

El SSHL puede ocurrir por una variedad de razones. A continuación se indican algunas de las más comunes.

Disfunción de la trompa de Eustaquio

Todas las personas tienen un pequeño tubo en el oído que conecta el oído medio con la nariz. Este tubo se llama trompa de Eustaquio. En circunstancias normales, la trompa de Eustaquio se abre y se cierra para permitir la ecualización de la presión entre el espacio situado directamente detrás del tímpano y el aire exterior.

Si alguna vez ha viajado en avión, es posible que haya sufrido dolor de oído causado por los rápidos cambios de presión del aire. Normalmente, estos cambios se producen cuando el avión despega y aterriza. En consecuencia, el dolor de oído es una respuesta a la trompa de Eustaquio que trabaja para hacer frente a los cambios repentinos y dramáticos de la presión del aire. El resfriado común o una infección de los senos paranasales también pueden hacer que la trompa de Eustaquio se sienta bloqueada y afecte a la audición.

Diagrama del oído interno que muestra la ubicación de la trompa de Eustaquio.

Acumulación de cera en los oídos

Tener demasiada cera en los oídos suele tener un impacto constante en la audición. En algunos casos, la pérdida de audición aparece y desaparece. Los audiólogos y otorrinolaringólogos no recomiendan utilizar bastoncillos de algodón para limpiar los oídos, ya que pueden hacer que el cerumen se alargue aún más en el canal auditivo. El uso de un kit de limpieza de cera de una farmacia o visitar a un médico para la irrigación del oído debe aclarar el problema.

Infecciones del oído

El líquido que contiene virus y bacterias puede acumularse en el oído medio y causar una infección del oído. Las infecciones de oído son muy comunes en los niños, pero también pueden afectar a los adultos. Las infecciones repetidas o graves pueden causar SSHL, que suele desaparecer tras un tratamiento satisfactorio de la infección del oído.

Lesión o traumatismo craneal

Un golpe repentino en la cabeza, como el que se produce en un accidente de coche o una agresión, puede causar una conmoción cerebral u otras lesiones que dañan la audición. Las personas pueden experimentar SSHL cuando el sistema auditivo y sus vías sufren daños tras la lesión o el traumatismo. Las partes del oído más comúnmente afectadas son el oído interno y el oído medio. El oído interno contiene un haz de células nerviosas sensibles llamado cóclea. El daño a estas células puede causar una pérdida temporal de la audición, una pérdida permanente de la audición o tinnitus. Cuando el golpe en la cabeza golpea el oído medio o externo, el resultado más típico es la pérdida de audición conductiva. Los traumatismos leves o moderados en esta zona que provocan una pérdida de audición suelen resolverse en unos pocos meses, mientras que los traumatismos graves pueden provocar una pérdida de audición permanente.

Exposición a ruidos fuertes

Asistir a un concierto, trabajar con maquinaria ruidosa o vivir en un barrio con mucho tráfico son sólo tres ejemplos de exposición a ruidos fuertes que pueden provocar SSHL. Dependiendo del decibelio del sonido, puede producirse un cambio temporal del umbral en el canal auditivo tras un incidente o una exposición repetida. El oído humano suele recuperarse por sí solo de la exposición al ruido y la audición normal vuelve gradualmente. Algo más podría estar afectando a los oídos si la audición completa no se recupera como se espera.

Entre las causas de la SSHL, la exposición a ruidos fuertes es una de las más comunes y es probablemente la más prevenible. Aunque no están clasificados como dispositivos de protección auditiva, los auriculares con cancelación de ruido, como los IQbuds² MAX, pueden ayudar a reducir la exposición a largo plazo a niveles de ruido de moderados a altos.

Enfermedad de Meniere

Algunas personas con la enfermedad de Meniere experimentan una pérdida auditiva fluctuante en la que la audición en un oído entra y sale durante un período de varios días. Las personas con esta condición deben tener visitas regulares de audiología para el manejo de los síntomas.

Diagnóstico y tratamiento del SSHL

¿Le preocupa que la audición entre y salga en un oído? Si es así, programe una cita con un audiólogo u ORL lo antes posible. El profesional médico comprobará la existencia de SSHL mediante una prueba de audición denominada audiometría de tonos puros. Estas pruebas determinarán si el sonido no llega al oído medio como debería. Una prueba de audiometría de tonos puros también puede mostrar al profesional el grado de pérdida auditiva.

Después de que un médico diagnostique el SSHL, el siguiente paso es determinar la causa y/o las condiciones médicas subyacentes. Los métodos de diagnóstico habituales incluyen una prueba de equilibrio, un análisis de sangre y una prueba de imagen como la resonancia magnética (RM).

El tratamiento más habitual para el SSHL es la prescripción de corticosteroides, especialmente cuando el médico no puede diagnosticar una causa específica. Los corticosteroides ayudan a reducir la hinchazón y la inflamación en el oído, así como a dar al cuerpo un impulso inmunitario adicional para combatir la enfermedad. La mayoría de los médicos recetan corticosteroides en forma de píldora, aunque algunos han empezado a ofrecer inyecciones más recientemente. Si esto no consigue restablecer la audición normal, las personas que padecen SSHL deben volver al mismo médico o solicitar una derivación para realizar pruebas adicionales.

Las personas con enfermedades subyacentes que contribuyen al SSHL necesitarán tratamiento para ese problema al mismo tiempo. El ejemplo más común es la necesidad de antibióticos para una infección de oído y corticosteroides para recuperar la audición. Tras recuperarse del SSHL, es importante evitar los mismos desencadenantes. Por ello, los profesionales médicos aconsejan que las personas de todas las edades protejan su audición siempre que sea posible.