Con la ayuda de las recomendaciones de su amigo y mecenas el conde Ferdinand von Waldstein, Beethoven fue pronto aceptado en los círculos aristocráticos de Viena. Estudió composición musical con Haydn hasta que éste se marchó a Londres a principios de 1794, y luego estudió armonía y contrapunto con Johann Georg Albrechtsberger. En 1792, también comenzó a estudiar composición vocal con Antonio Salieri. En poco tiempo, Beethoven se había convertido en un compositor muy solicitado en Viena y, gracias al apoyo de sus mecenas, podía trabajar como compositor independiente.
La primera actuación pública de Beethoven en Viena fue el 29 de marzo de 1795. Dio un concierto de piano, o Akademie, en el Burgtheater de Viena como parte de un evento organizado por Joseph Haydn (probablemente Op. 15).
En estos primeros años, el éxito de Beethoven como compositor estuvo estrechamente ligado a su carrera y renombre como virtuoso del piano. En sólo sus primeros diez años en Viena, completó 20 de sus 32 sonatas para piano, incluyendo la Grande Sonate Pathetique Op. 13 en Do menor y las dos sonatas Opus 27, la segunda de las cuales se hizo famosa como la Sonata «Claro de Luna» (no nombrada por el propio Beethoven). Y Beethoven siguió causando sensación con su increíble juego de improvisación.
En 1798, el joven virtuoso realizó una gira de conciertos -un tremendo éxito artístico y financiero- que incluyó actuaciones en Praga, Dresde y Berlín. Iniciada por el príncipe Karl Lichnowsky, la gira siguió la ruta de la gira organizada por Lichnowsky para Mozart en 1789.
Las primeras composiciones de Beethoven que aparecieron impresas fueron sus tres tríos para piano, escritos en 1794/95 y designados como Opus 1. En los años siguientes, Beethoven se dedicó a otros dos géneros fundamentales de la música clásica: el cuarteto de cuerda y la sinfonía. Entre 1798 y 1800, tras estudiar detenidamente los cuartetos de Haydn y Mozart, Beethoven compuso su primera serie de seis cuartetos, el Opus 18, que dedicó al príncipe Lobkowitz. Poco después, en 1800 y 1802, Beethoven produjo sus primeras sinfonías. Su Sinfonía nº 1 en do mayor, Op. 21, fue dedicada al barón Gottfried van Swieten; la Sinfonía nº 2 en re mayor, Op. 36, fue dedicada al príncipe Lichnowsky. El 2 de abril de 1800, Beethoven celebró su primer concierto propio en Viena: el estreno mundial de la Sinfonía nº 1.
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