- Trastorno del espectro autista: cómo afecta al desarrollo
- Trastorno del espectro autista: cómo afecta a la atención y a la interacción
- Trastorno del espectro autista: cómo afecta a la comprensión
- Trastorno del espectro autista: control y regulación
- Trastorno del espectro autista: ver la «imagen completa»
Trastorno del espectro autista: cómo afecta al desarrollo
Los niños con trastorno del espectro autista (TEA) se desarrollan a un ritmo diferente y no necesariamente desarrollan las habilidades en el mismo orden que los niños con un desarrollo típico.
Por ejemplo, los niños con TEA pueden empezar a utilizar algunas palabras sueltas alrededor de los 12 meses de edad. Puede que no tengan la explosión de lenguaje que tienen otros niños, quizás aprendiendo sólo un par de palabras nuevas cada mes. Puede que tengan que esperar hasta los tres años, o más, para empezar a combinar estas palabras en frases cortas.
O los niños con TEA pueden ser capaces de etiquetar las partes de su propio cuerpo pero no pueden etiquetar las partes del cuerpo en imágenes. O puede que sean capaces de identificar los colores pero no de clasificarlos.
Trastorno del espectro autista: cómo afecta a la atención y a la interacción
Los niños con trastorno del espectro autista (TEA) no sintonizan con otras personas de la misma manera que los bebés y niños de desarrollo típico.
Por ejemplo, los niños con TEA pueden no responder a sus nombres, establecer contacto visual, sonreír a sus cuidadores o decir adiós con la mano sin que se lo digan. Los niños con TEA también pueden no utilizar el contacto visual o señalar con los dedos para llamar su atención o comunicarse.
El uso del contacto visual y los gestos para compartir experiencias con los demás se denomina atención conjunta (o atención compartida). Los niños con TEA suelen tener dificultades en esta área.
La dificultad con la atención conjunta puede dificultar que los niños con TEA desarrollen habilidades de comunicación y lenguaje. Por ejemplo, si uno de los padres está señalando la imagen de un perro, pero el niño está mirando a otro lugar, será más difícil que el niño aprenda la relación entre la imagen de un perro y la palabra «perro».
La dificultad con la atención conjunta también puede dificultar que estos niños aprendan habilidades como tomar turnos, interpretar expresiones faciales o mantenerse en el tema de una conversación.
La atención es una habilidad que se desarrolla con el tiempo. Nuestro artículo sobre el aprendizaje de la atención explica cómo puede utilizar el juego para desarrollar esta habilidad en su hijo con TEA.
Trastorno del espectro autista: cómo afecta a la comprensión
A los niños con trastorno del espectro autista (TEA) les resulta difícil ver las cosas desde el punto de vista de otras personas.
Puede que les cueste entender que otras personas pueden tener deseos y creencias diferentes a los suyos. También pueden tener dificultades para comprender y predecir el comportamiento de otras personas, y para entender cómo su comportamiento afecta a los demás.
Ver las cosas desde el punto de vista de los demás es una habilidad social importante. Sin ella, los niños con TEA pueden tener dificultades para entender y llevarse bien con otras personas.
En la vida cotidiana, esto puede significar que los niños con TEA no entiendan por qué otra persona está molesta.
Típicamente, los niños en desarrollo desarrollan estas habilidades alrededor de los 3-5 años, pero puede tomar mucho más tiempo para los niños con TEA.
Puede utilizar estrategias como el juego de roles y el modelado en vídeo para ayudar a su hijo con TEA a aprender habilidades sociales.
Trastorno del espectro autista: control y regulación
Los niños con trastorno del espectro autista (TEA) pueden tener problemas de concentración, atención, transiciones, organización, memoria, gestión del tiempo, control emocional y frustración. Utilizamos estas habilidades de alto nivel para ayudarnos a realizar muchas tareas diarias, como trabajar en cooperación con otros y priorizar las cosas que tenemos que hacer.
Las dificultades con estas habilidades pueden afectar al aprendizaje de los niños. Por ejemplo, al intentar resolver un problema de matemáticas, un niño puede conocer bien los datos, pero no ser capaz de encontrar una solución. Esto se debe a que el niño no puede organizar las ideas o juntar toda la información para resolver el problema.
Las dificultades con las habilidades de alto nivel a veces pueden conducir a un comportamiento desafiante. Nuestro artículo sobre el manejo de la conducta desafiante en niños con TEA tiene ideas e información que pueden ayudar.
Trastorno del espectro autista: ver la «imagen completa»
Los niños con trastorno del espectro autista (TEA) tienen dificultades para ver la «imagen completa». Pueden perderse en los detalles, en lugar de reunir diferentes fuentes de información y ver la situación como un todo.
Por ejemplo, cuando alguien que puede ver el panorama general mira una extensión interminable de árboles, esa persona vería «el bosque». Pero alguien que no puede ver el panorama general sólo vería muchos árboles individuales.
Las dificultades en esta área pueden afectar al aprendizaje y al desarrollo de los niños. Por ejemplo, después de leer un cuento, un niño puede recordar los pequeños detalles pero olvidar lo que significa la historia en general. Un niño más pequeño puede mirar un libro ilustrado y centrarse en los detalles del fondo, en lugar de en los personajes y el argumento.
La capacidad de centrarse en los detalles también puede ser un punto fuerte. En nuestro artículo sobre los puntos fuertes del pensamiento y el aprendizaje, puede leer más sobre cómo detectar los puntos fuertes del pensamiento de su hijo y utilizarlos para promover su desarrollo.
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