• Dolor pélvico. En la semana 34, a medida que el bebé desciende hacia la pelvis en preparación para el parto, es posible que experimentes algo de dolor pélvico, molestias en la zona lumbar o presión en la vejiga. Por otro lado, como el bebé ha descendido, es posible que sientas menos presión sobre el diafragma y los pulmones, lo que facilita la respiración. Para ayudar a aliviar cualquier dolor pélvico, intenta no ponerte de pie cuando te sientas más incómoda. Un baño de inmersión en una bañera caliente también puede aliviarte. Si estas ideas no funcionan, hable con su médico para que le aconseje qué hacer.

  • Tobillos y pies hinchados. No es raro que las mujeres tengan los tobillos y los pies hinchados en esta etapa del embarazo. Una forma de ayudar a aliviar la hinchazón es reducir el tiempo de estar de pie tanto como puedas. Además, cuando estés sentada, puedes apoyar las piernas en una almohada. En los momentos en que sienta molestias por la hinchazón y no pueda sentarse, el uso de zapatos de apoyo podría ayudar.

  • Estreñimiento. Las deposiciones difíciles de evacuar y poco frecuentes pueden ocurrir por muchas razones diferentes. Sea cual sea la causa, pueden ser muy incómodas. Una buena táctica es beber mucha agua, zumo de ciruelas u otros zumos de frutas, así como comer alimentos ricos en fibra, como frutas, verduras, pan integral y cereales de salvado. Además, intente caminar o hacer ejercicios suaves para ayudar a su sistema digestivo. Por último, comer comidas más pequeñas y frecuentes en lugar de unas pocas comidas grandes podría mejorar su digestión.

    • 34 Semanas de Embarazo: Cosas a tener en cuenta

    • La llegada de un nuevo bebé puede ser difícil de manejar para los hermanos mayores debido a todos los cambios que se producen. Los padres dedican mucho esfuerzo a la preparación del nuevo bebé y, tras su llegada, el cuidado del recién nacido requiere gran parte de la atención de la familia. No es raro que los hermanos mayores sientan algunos celos y reaccionen a los cambios portándose mal. Sin embargo, los padres pueden ayudar a facilitar la transición y preparar a los hermanos para el nuevo miembro de la familia. Hablar del embarazo de forma que tenga sentido para los hermanos mayores puede ayudar. Por ejemplo, puedes explicarles de dónde viene el nuevo bebé de una forma adecuada a su edad. Hay libros para niños que pueden ayudarte con esto. Además, incluir a los niños en la preparación de la llegada del nuevo bebé puede ser una forma estupenda de ayudarles a aceptar la idea de que el recién nacido se una a la familia. Una forma de involucrar a tus hijos mayores es dejar que te ayuden a comprar los artículos que necesitas para el recién nacido. También es una buena idea hablar con ellos sobre el papel que pueden desempeñar para ayudarte con el nuevo bebé antes de que llegue. Asegúrate de pasar tiempo de calidad con tus hijos mayores para que sepan que siguen siendo miembros valiosos y queridos de la familia.

    • El calcio ayuda a formar y endurecer los huesos y dientes de tu bebé, por lo que consumir suficiente calcio durante el embarazo es una prioridad, tanto para la salud de tu bebé como para la tuya. Las vitaminas prenatales pueden contener calcio, pero también es importante consumir alimentos ricos en calcio. Algunas fuentes de alimentos excelentes, aparte de los productos lácteos como la leche, el queso y el yogur, son las sardinas, las verduras de hoja verde como el brócoli y los zumos enriquecidos con calcio. Esto significa que las futuras mamás intolerantes a la lactosa también tienen grandes opciones para obtener calcio adicional. Obtenga más información sobre la cantidad de calcio que necesita durante el embarazo y pregunte a su médico si está ingiriendo suficiente. Es posible que su proveedor le recomiende tomar un suplemento de calcio u obtener más haciendo cambios en su dieta.

    • Lo último de lo que quiere preocuparse cuando se ponga de parto es de decidir qué meter en su bolsa para llevar al hospital. Por eso hemos recopilado una lista de comprobación de la bolsa del hospital para asegurarnos de que no se olvida de las cosas imprescindibles y agradables que puede querer llevar en el gran día. Enumeramos las cosas que necesitarán usted, su pareja y su bebé recién nacido.

    34 semanas de embarazo: Pregúntale a tu médico

    • ¿En qué posición está mi bebé?

    • Si mi bebé viene de nalgas, ¿qué posibilidades hay de que pase a la posición de cabeza?

    • ¿Qué ejercicios o estiramientos puedo hacer para aliviar la presión en la parte baja de la espalda?

    • Me gustaría hacer un curso de formación en RCP para bebés. ¿Hay alguno que recomiende?

    34 semanas de embarazo: Tu lista de comprobación

    • Asegúrate de que tienes el equipo esencial para tu recién nacido.

    • Si aún no has elegido una silla de seguridad para el coche del bebé adecuada, ahora es un buen momento para echar un vistazo a tus opciones.

    • Piensa si quieres recibir visitas en el hospital después de que nazca tu bebé. Puede que te parezca bien que algunos amigos y miembros de tu familia más cercana se pasen por el hospital durante las horas de visita, pero tener demasiados podría ser estresante.

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    34 semanas de embarazo: Su lista de control

    Cómo escribimos este artículo
    La información de este artículo se basa en los consejos de expertos que se encuentran en fuentes médicas y gubernamentales de confianza, como la Academia Americana de Pediatría y el Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos. El contenido de esta página no debe sustituir el asesoramiento médico profesional. Consulte siempre a los profesionales médicos para obtener un diagnóstico y un tratamiento completos.