Una nueva forma de imagen por resonancia magnética (IRM), combinada con mediciones de electroencefalografía (EEG), ha permitido relacionar la microestructura del planum temporale con la velocidad de procesamiento del habla auditiva. El equipo dirigido por el Dr. Sebastian Ocklenburg, Patrick Friedrich, Christoph Fraenz, el Prof. Dr. h. c. Onur Güntürkün y el Dr. Erhan Genç expone sus hallazgos en un artículo publicado en la revista científica Science Advances del 11 de julio de 2018.

Dominio del hemisferio izquierdo del lenguaje

Utilizando un sencillo experimento, los investigadores pueden demostrar lo superior que es el hemisferio izquierdo cuando se trata de procesar el habla auditiva: cuando se reproducen dos sílabas diferentes -por ejemplo, «Da» y «Ba»- en el oído izquierdo y derecho de una persona a través de los auriculares, la mayoría de las personas afirmará que solo escuchó la sílaba en el oído derecho. La razón: el lenguaje que se percibe a través del oído derecho se procesa en el hemisferio izquierdo. Cuando se miden las ondas cerebrales mediante un electroencefalograma, se observa que el hemisferio izquierdo procesa más rápidamente la información del habla auditiva.

«Los investigadores han determinado desde hace tiempo que una región del cerebro que es crucial para el procesamiento del habla auditiva, es decir, el planum temporale, suele ser más grande en el hemisferio izquierdo que en el derecho», afirma Sebastian Ocklenburg, de la unidad de investigación de biopsicología de Bochum. En los cerebros de individuos fallecidos que habían donado sus cuerpos a la ciencia, los investigadores de Fráncfort descubrieron posteriormente que las células nerviosas del planum temporale izquierdo tienen un mayor número de sinapsis neuronales que las del hemisferio derecho.

Un nuevo método de medición facilita conocimientos hasta ahora imposibles

«Sin embargo, hasta ahora no se había entendido si esa microestructura asimétrica es el factor decisivo para la superioridad del hemisferio izquierdo a la hora de procesar el habla auditiva», explica Erhan Genç, también miembro de la unidad de investigación de biopsicología. Como hasta hace muy poco no existía un método para contar el número de sinapsis neuronales en seres humanos vivos, ese número no podía relacionarse de forma concluyente con el rendimiento del procesamiento del habla auditiva. Ahora, los investigadores han colmado esta laguna con la ayuda de las llamadas imágenes de dispersión y densidad de la orientación de las neuritas.

A través de esta tecnología de resonancia magnética altamente específica, los biopsicólogos midieron la densidad y la disposición espacial de las neuritas del planum temporale en casi un centenar de participantes en la prueba. Al mismo tiempo, utilizaron mediciones de EEG para analizar la velocidad de procesamiento de la información del habla auditiva tanto en el hemisferio izquierdo como en el derecho de los mismos individuos.

Mayor velocidad gracias a más neuritas

El resultado: los participantes en la prueba que eran capaces de procesar el habla auditiva en el hemisferio izquierdo a gran velocidad poseían un número extraordinariamente alto de neuritas densamente empaquetadas en el planum temporale izquierdo. «Gracias a esta microestructura, el procesamiento del habla auditiva es más rápido en el hemisferio izquierdo; es de suponer que estos individuos también son capaces de descodificar lo que oyen con mayor precisión temporal», concluye Ocklenburg. «La mayor densidad de conectividad parece, pues, un componente crucial para la superioridad lingüística de nuestro hemisferio izquierdo», añade Genç.